Situada en el Golfo de Finlandia y con una gran influencia rusa, Helsinki es seguramente una de las capitales europeas que más frio me ha dejado (y no solamente por su clima) y de las que menos me ha gustado visitar.
Puerta de entrada de los grandes cruceros que visitan las Repúblicas Bálticas, es una ciudad para visitarla caminando y exprimirla en un máximo de 24 horas, ya que la ciudad no ofrece mucha variedad de paisajes ni monumentos, a diferencia del resto del país.
FICHA TÉCNICA DEL VIAJE
FECHA: Abril 2.017
DÍAS: 1
DOCUMENTACIÓN NECESARIA
DNI
Pasaporte con mínimo 6 meses de validez, aunque para ciudadanos de la Unión Europea no hace falta.
OTROS DATOS DE INTERÉS
IDIOMA: Se habla el finés, aunque todos los habitantes hablan el inglés con fluidez.
MONEDA: La moneda es el Euro, escrito €.
TARJETAS: Se acepta el pago con tarjetas en cualquier lugar. No hay problemas para sacar dinero en cajeros automáticos, pero conviene saber el tipo de comisión que te puede aplicar tu entidad bancaria.
GUIA DE VIAJE: Como siempre será la Lonely Planet, en éste caso la Guía de Finlandia.
TELEFONO: Hay cobertura de teléfono en todo el país, pero conviene tener contratado el roaming.
INTERNET: Prácticamente en cualquier punto de la ciudad hay zonas habilitadas para conectarse y en la mayoría de alojamientos y restaurantes disponen de wifi gratuito.
SEGURIDAD: País 100% seguro y tolerante en cualquier momento del día, aunque siempre hay que ir con precaución y con sentido común.
VACUNAS: No hay ninguna vacuna obligatoria.
ELECTRICIDAD: El voltaje es de 230 V y no hace falta adaptador para los enchufes.
DIFERENCIA HORARIA: En el momento de mi viaje, +1 hora respecto a España.
RELIGIÓN: Mayoritariamente luteranos y en menor porcentaje, ortodoxos.
PRESUPUESTO DEL VIAJE
DESGLOSE DEL PRESUPUESTO IMPORTE
VUELO Copenhague-Helsinki con Norwegian (IDA) 43,10 €
ALOJAMIENTO 32,00 €
TRANSPORTE 11,40 €
TRANSPORTE 11,40 €
OTROS (COMIDAS, COMPRAS, GASTOS PERSONALES,..) 28,41 €
Total Presupuesto por Persona 114,91 €
EL ITINERARIO DEL VIAJE
Helsinki es una ciudad que se puede recorrer tranquilamente en 24-36 horas, sus pocos puntos turísticos son abarcables a pie o en un pequeño paseo, y es una ciudad ideal para una escapada de un día desde la ciudad de Tallinn, o bien como puerta de entrada o salida para visitar la Laponia Finlandesa.
TRANSPORTE A/DESDE AEROPUERTO
Existen varias formas de llegar al Rautatientori o Estación Central de Helsinki, considerado como el centro neurálgico de la ciudad, dependiendo del tiempo que tengamos y del importe que nos queramos gastar en el trayecto, que son las siguientes:
- Tren: Es la forma más rápida de llegar a la ciudad, ya que te evitas los atascos que puedan existir para llegar al centro de Helsinki, y es más cómodo para no tener que ir preocupándote de tu equipaje, y sobretodo, tiene mucha frecuencia de viajes. El trayecto tiene una duración de unos 35 minutos y cuesta 5 € por persona, y aunque es muy buena opción, la única pega que le encuentro es que la estación de trenes del aeropuerto se encuentra a unos 500 metros de distancia de la terminal, y si llegas cansado o muy cargado de equipaje no creo que sea muy buena idea llegar hasta allí. Tenéis más información a través de la web de HSL, la compañía finlandesa de transportes.
- Bus: El bus público fue mi opción escogida, ya que la parada se encuentra justo delante de la terminal de salidas del aeropuerto, y el autobús número 615 te deja en un lateral de la Estación Central. El precio del ticket también cuesta 5 € y se puede comprar en las máquinas expendedoras que hay en la misma marquesina de la parada, dónde se puede pagar en efectivo o con tarjeta de crédito sin problemas. El trayecto dura unos 45 minutos dependiendo del tráfico, y yo me decidí por esta opción principalmente porque lo tenía delante de mis narices y así no tenía que andar mucho, y porque lo cogí muy pronto por la mañana y apenas me iba a encontrar tráfico de camino a la ciudad, como así fue. La única pega que le encuentro es que hace muchas paradas, y al ser entre semana, suben muchos escolares y se llena bastante el autobús. Tenéis más información a través de la web de HSL, sobretodo si queréis mirar los horarios por si os encaja, y no estar pendientes de la llegada de vuestro vuelo.
- Bus Finnair: La compañia nacional de vuelos es Finnair, y he tenido la suerte de poder volar con ellos a China y tanto los aviones como el servicio en su interior son impecables. También disponen de servicio lanzadera del aeropuerto a la ciudad y viceversa, el trayecto cuesta 6,30 € y el tiempo invertido en hacer el trayecto es de unos 40 minutos, dependiendo del tráfico, y hace menos paradas que el autobús público número 615 que escogí yo. Tenéis más información a través de la web de Finnair.
- Taxi: No vas a tener problemas para encontrar uno disponible ya que tanto en la terminal de llegadas como de salidas vais a tener a vuestra disposición unos cuántos. A mi ni siquiera se me pasó por la cabeza la opción de llegar a la ciudad en uno de ellos, y más teniendo en cuenta que su coste oscila entre los 50-60 € por carrera.
Resumiendo, no os tenéis que preocupar por la hora que llega vuestro vuelo porque siempre tendréis una opción de llegar al centro de la ciudad en transporte público, aunque sea a horas intempestivas de la noche. Los precios no son muy baratos pero están acorde al nivel de vida de Finlandia, un país bastante caro igual que sus países vecinos escandinavos.
El centro de Helsinki es bastante compacto y se puede recorrer cómodamente a pie, pero en el momento que te alejas un poco es recomendable utilizar el transporte público o bien moverse en bicicleta, como hacen los locales.
En caso que tengas que hacer uso del transporte público para trasladarte a las zonas más alejadas, recomiendo utilizar el tranvía, es cómodo, funciona de maravilla y además no contamina nada. Los tickets no son precisamente baratos pero lo bueno que tiene es que dispones de 90 minutos para moverte por él con el mismo ticket, aunque sea en diferentes tranvías y diferentes líneas. El ticket se puede comprar en las máquinas expendedoras que hay en las marquesinas de muchas paradas, o bien comprarlo directamente al conductor, que te lo vende sin problemas. Los tickets siempre hay que validarlos en las máquinas que hay en su interior, y aunque parezca que es fácil colarse o que no pasen los revisores, éstos siempre van de paisano y si te sorprenden sin ticket deberás pagar una multa de 100 € más el importe del ticket en ese preciso momento.
Yo solamente tuve que hacer uso del tranvía en un par de ocasiones, una para llegar al Sibelius Park y la otra para llegar a la terminal de ferries y cruceros de Helsinki, que se encuentra en la otra punta de la ciudad. El precio del ticket es de aproximadamente 3,20 €, dependiendo de la zona a dónde te dirijas.
Los tranvías número 4 y 6 son los que hacen el trayecto por las zonas más turísticas de la ciudad.
TRANSPORTE POR MAR
La mejor forma de moverse desde Helsinki hasta Tallinn, puerta de entrada a los Países Bálticos, es en ferry, y existen diferentes compañías o navieras que realizan este recorrido, que son las siguientes:
- Viking Line: Quizá sea la compañía más conocida o la que todo el mundo recomienda, pero también es la más cara con diferencia. Ofrece trayectos desde Helsinki hacia Tallinn y también a varios puntos de Suecia, entre ellos a Estocolmo. Lo mejor es mirar en la web de Viking Line con bastante antelación para conseguir mejores tarifas, así como escoger el horario que más se ajuste a nuestras necesidades.
- Tallink Silja Line: Personalmente es la compañía que más recomiendo y la que utilicé yo, ya que dispone de buenos horarios, sacan promociones bastante tentadoras de vez en cuando y el interior del barco se asemeja más a uno de crucero que no a un ferry convencional, ya que dispone de restaurantes, bares, casinos e incluso un supermercado dónde la gente se vuelve loca comprando por sus precios libres de impuestos, sobretodo de tabaco y alcohol. A través de la web de Tallink Silja podemos comprar nuestros tickets cómodamente e imprimirlos desde casa como si fuera una tarjeta de embarque y poder embarcar 30 minutos antes de la salida del ferry. En mi caso, me beneficié de una pequeña promoción y pagué 23 € por mi trayecto (solo ida), pero está claro que sale más a cuenta un viaje de ida y vuelta en el mismo día.
- Eckerö Line: Esta compañía, aunque tiene menos amplitud de horarios y su terminal de salidas se encuentra más alejada (el tranvía te deja en la misma puerta), es recomendable si no queremos gastar mucho dinero y buscamos el precio más económico, ya que podemos recorrer los dos países por 15 € el trayecto. Se recomienda comprar los tickets con tiempo a través de la web de Eckerö Line o en la misma terminal de ferries, aunque en esta última el precio es mucho más caro que si lo hacemos por la web. Son ferries más pequeños que las otras compañías, pero igual de cómodos y el trayecto es un poco más corto.
- Linda Line: De esta compañía no puedo opinar mucho porque apenas la conozco y en su momento no investigué mucho, solamente puedo decir que tienes precios muy atractivos pero en vez de ferries parecen speed boat, supongo que no disponen de tantos lujos y comodidades, y los trayectos son más cortos. Podéis tener más información a través de la web de Linda Line y valorar lo que os sale más a cuenta.
ALOJAMIENTO
The Yard Concept Hostel. Teniendo en cuenta que los precios de los alojamientos en Helsinki y en cualquier país escandinavo son demasiado caros, y que además iba a estar solamente un día para visitar la ciudad, no tuve ninguna duda en buscar un hostel con habitaciones compartidas sin necesidad de dejarme un gran presupuesto, y fue todo un acierto alojarme en este lugar, sobretodo porque Matilda, la joven guapa y empleada de recepción, me hizo sentir como en casa desde el primer momento.
El alojamiento está ubicado en pleno centro de la ciudad y a escasos dos minutos de la Estación Central, principal nudo de transporte de la ciudad. A pesar del bullicio de gente en la calle, el alojamiento está dentro de un edificio totalmente reformado, sin ruido exterior y poco tráfico porque la mayoría de personas se mueven en tranvía. A la entrada del alojamiento encontramos la pequeña recepción, junto a la zona de estar para compartir con otros viajeros y una gran cocina. Hay diferentes tipo de habitaciones, decidiéndome por una habitación compartida de 6 camas, dónde cada una dispone de sus propios enchufes, lamparita de luz, cajón para guardar el equipaje y sobretodo, su cortina para preservar la intimidad de cada uno o para poder leer tranquilamente sin molestar a los demás viajeros.
Reservado a través de Booking, habitación compartida de 6 camas, con baño compartido y sin desayuno incluido (pero te lo puedes preparar tú mismo ya que disponen de una gran cocina), me ha costado 32 € por noche, que he pagado encantado teniendo en cuenta sus modernas instalaciones, su céntrica ubicación, su red de transporte casi en la misma puerta del edificio, lo cómodo que me he sentido y sobretodo, la hospitalidad por parte del personal, sobretodo de Matilda.
Alojamiento muy recomendable si viajas solo, buscas un alojamiento céntrico que te permita no coger transporte público para moverte y no dejarte un gran presupuesto, y no te importe compartir habitación y baño con desconocidos.
LO MEJOR DEL VIAJE
* La amabilidad y educación de la gente, siempre ofreciéndose y dispuestos a ayudarte en cualquier cosa desinteresadamente en el mismo momento que te ven con un mapa en la mano. Increíble lo bien organizado que lo tienen todo en este país y lo fácil que es recorrerla porque está todo muy bien señalizado y hay diferentes oficinas de turismo donde hacerse con un plano de la ciudad, y dónde no escatiman en darte recomendaciones de todo tipo.
* Lo fácil que es orientarse por la ciudad y recorrerla a pie, disfrutando de largos paseos a través de sus calles y parques, aunque también es cierto que la ciudad se recorre fácilmente en un día y no hay muchos rincones turísticos que visitar.
* Poder visitar la ciudad en estas fechas sin aglomeraciones de turistas ni cruceristas que apenas te dejan hacer fotos en condiciones, y que por desgracia he sufrido personalmente en otras ciudades europeas.
* La buena red de transportes que ofrece la ciudad, en un principio no deberías necesitarlo para moverte por la ciudad pero sí para trasladarte al aeropuerto de la ciudad o a la terminal de ferries.
LO PEOR DEL VIAJE
* Poder visitar la ciudad en estas fechas sin aglomeraciones de turistas ni cruceristas que apenas te dejan hacer fotos en condiciones, y que por desgracia he sufrido personalmente en otras ciudades europeas.
* La buena red de transportes que ofrece la ciudad, en un principio no deberías necesitarlo para moverte por la ciudad pero sí para trasladarte al aeropuerto de la ciudad o a la terminal de ferries.
LO PEOR DEL VIAJE
* El nivel de vida y los precios del país, una auténtica ruina para un bolsillo de un viajero normal, y aunque existen alternativas para abaratar nuestro presupuesto, resulta muy caro alojarse en la ciudad, moverse en transporte público e incluso para comer o ir de compras en los grandes almacenes Stockmann.
* El resto del país tiene que ser una maravilla, sobretodo en el duro invierno para poder visitar la Laponia Finlandesa o incluso Rovaniemi en Navidad, dónde Helsinki debería ser el inicio y final de una ruta por el país, o si me apuráis mucho, es una buena alternativa para visitarlo en un día en una excursión de ida y vuelta desde Tallinn si estáis recorriendo las Repúblicas Bálticas, pero hacer un viaje expresamente para visitar la capital finlandesa bajo mi humilde opinión me parece un gran error, ya que me he encontrado una de las ciudades europeas más feas que he podido visitar, fría y sin alma, que no me ha transmitido nada más allá de los dos o tres rincones turísticos y conocidos que ofrece la ciudad. Un destino a visitar si os coge de paso, sino yo no perdería el tiempo y el dinero en visitarla.
Y con todo explicado, nos vamos a hacer una breve escapada para conocer Helsinki!!!
* El resto del país tiene que ser una maravilla, sobretodo en el duro invierno para poder visitar la Laponia Finlandesa o incluso Rovaniemi en Navidad, dónde Helsinki debería ser el inicio y final de una ruta por el país, o si me apuráis mucho, es una buena alternativa para visitarlo en un día en una excursión de ida y vuelta desde Tallinn si estáis recorriendo las Repúblicas Bálticas, pero hacer un viaje expresamente para visitar la capital finlandesa bajo mi humilde opinión me parece un gran error, ya que me he encontrado una de las ciudades europeas más feas que he podido visitar, fría y sin alma, que no me ha transmitido nada más allá de los dos o tres rincones turísticos y conocidos que ofrece la ciudad. Un destino a visitar si os coge de paso, sino yo no perdería el tiempo y el dinero en visitarla.
Y con todo explicado, nos vamos a hacer una breve escapada para conocer Helsinki!!!
DÍA 1.- COPENHAGUE - HELSINKI
Después de un vuelo nocturno procedente de Copenhague que llegó pasada la medianoche a Helsinki y con mucha pereza de llegar al alojamiento a horas intempestivas de la noche y no poder disfrutar del alojamiento por lo caro que resulta en una ciudad como Helsinki, decidí pasar unas horas durmiendo en su aeropuerto, en la que estuve muy tranquilo y seguro pero que apenas pude dormir nada y aproveché para entablar conversación con otros viajeros que allí se encontraban para coger sus vuelos internacionales a primera hora de la mañana.
Sobre las 07:30h de la mañana decidí que ya estaba cansado de estar en el aeropuerto, y aunque fuera hacia mucho frio todavía, decidí ir en busca de mi autobús público número 615 que en un trayecto de unos 40 minutos me dejó en un lateral de la Estación Central, muy próximo a mi alojamiento que tenía reservado para el día de hoy. Solamente bajarme del autobús y sacar mi reserva de alojamiento para mirar el nombre de la calle, se me acerca una mujer y me pregunta si puede ayudarme, le digo que voy en busca de mi alojamiento y muy amablemente me indica cómo puedo llegar. Como no podía ser de otra manera cuando se visita un país escandinavo, la hospitalidad, educación y las ganas de ayudar y de que te sientas cómodo por parte de su gente está a la orden del día.
Antes de las 09h de la mañana ya estoy entrando en mi alojamiento, y aunque soy consciente que hasta las 15h no tendré la habitación ni puedo hacer el check in, almenos me permiten dejar mi equipaje gratuitamente y hacerme con un mapa de la ciudad, dónde Matilda, la guapa chica de recepción se preocupa en explicarme y señalarme en el mapa todo lo que puedo visitar, recomendaciones gastronómicas y contestar pacientemente a todas mis preguntas como si de una oficina de turismo se tratara. Solamente por el trato y cariño que tienen con sus huéspedes ya vale la pena alojarse aquí, aparte de sus instalaciones y de su céntrica ubicación.
Con toda la información recibida, lo primero que hago es buscar un lugar dónde desayunar y llevarme algo calentito al estómago, así que me voy a la Estación Central y desayuno tranquilamente en una de las diferentes cafeterías de las que disponen, dónde después de pedir una pasta y un capucchino y pagar cerca de 6 €, vuelvo a la realidad de los precios de estos países.
Ahora si, con las energías renovadas me dispongo a empezar las visitas y a hincarle el diente a la ciudad, dónde tengo prácticamente un día para recorrerla entera, y visitar los siguientes puntos:
- Rautatientori: Su traducción sería como la Plaza del Ferrocarril, ya que aquí se encuentra la Estación Central de Helsinki y principal nudo de comunicaciones de la ciudad, ya que convergen diferentes transportes como es el tren, el tranvía, el autobús y el metro. Sin duda lo más destacable y más bonito es su fachada de Art Nouveau, obra del arquitecto finés Eliel Saarinen.
- Catedral de Uspenski: Para llegar hasta aquí lo podéis hacer en tranvía, aunque desde la Rautatientori son prácticamente 15 minutos caminando tranquilamente. Es la Catedral ortodoxa de Helsinki y está dedicada a la Virgen María, y su construcción data del año 1.862. Se encuentra edificada encima de una colina y es uno de los puntos más turísticos de la ciudad, destacando su fachada de ladrillo rojo, con sus bulbos y cúpulas verdes y doradas, y coronadas por las cruces ortodoxas, tan típicas en estas construcciones y que ya he tenido la suerte de visitar muchas otras, sobretodo en Rusia.
Su horario es de 09h a 19h y la entrada es gratuita. Se pide discreción a la hora de realizar fotografías y respetar las normas de vestimenta, nada de pantalones cortos ni camisetas de tirantes para los hombres, y las mujeres con pañuelo en la cabeza tapando su pelo.
- Kauppatori: Más conocido como la "Plaza del Mercado" y lugar donde se encuentran los puestos y carpas de comida al aire libre que permanecen abiertos todo el año, algunos tenderetes de artesanía y venta de souvenirs con productos típicos de la zona. Es un buen lugar para hacer un alto en el camino y comer algo, ya que los precios están muy ajustados y podemos probar gastronomía típica del país como la sopa de alce y sobretodo el salmón.
- Puerto de Helsinki: Justo enfrente de la Plaza del Mercado podemos encontrar el Puerto de Helsinki, lugar dónde atracan los cruceros que recorren el Mar Báltico para hacer escala en la ciudad, o lugar desde donde parten los ferries que van y vienen hacia Tallinn (Estonia) o Estocolmo (Suecia).
Hay que tener mucho cuidado porque no todas las compañías parten desde el Puerto de Helsinki, ya que las más importantes parten desde la terminal de cruceros un poco más alejado de la ciudad.
Si tenéis tiempo desde aquí también parten los barcos para visitar la Isla de Suomenlinna, una antigua fortaleza del S. XVIII y a tan sólo 20 minutos de trayecto. Yo no pude hacer esta visita porque no tenía mucho tiempo y en invierno la frecuencia de los barcos no es muy extensa, aparte del frio.
- Vanha Kauppahalli: Este bonito edificio ubicado enfrente del anterior y en pleno puerto de Helsinki alberga desde 1.889 el Mercado Viejo de la ciudad, lleno de pequeños puestos gourmets, cafeterías y restaurantes donde probar gastronomía típica del país, pero a precios bastante caros comparado con otros restaurantes de la ciudad, aunque aquí lo que prima es la calidad de sus productos.
- Havis Amanda: En un extremo de la Esplanade y justo enfrente del Puerto de Helsinki, podemos encontrar esta bonita fuente, que simboliza a una sirena despidiéndose del mar. A partir de aquí da comienzo la Esplanade.
- Esplanade: Es un gran parque arbolado rodeado en cada extremo por lujosas tiendas de diseño, buenos restaurantes y hoteles de categoría. En una de las esquinas se encuentra una de las Oficinas de Turismo de la ciudad, un buen punto de encuentro para hacerse con un plano de la ciudad, resolver todas vuestras dudas gracias al amable personal e incluso comprar algún souvenir.
- Senaatintori: Apenas a dos minutos caminando desde la Esplanade dirección a la Rautatientori, podemos llegar quizás al emblema más turístico de la ciudad, la Plaza del Senado. Esta enorme plaza presidida por una estatua ecuestre del zar Alejandro, es el centro arquitectónico de la ciudad y alberga otros edificios importantes, como el Palacio del Consejo de Estado, la Biblioteca Nacional, la Universidad, y sobretodo la Tuomiokirkko, más conocida como la Catedral de Helsinki, con sus enormes escalinatas y sus cúpulas verdes. Imprescindible su visita al interior, que es gratuita y apreciar su órgano.
- Aleksanterinkatu: Es la calle más comercial de Helsinki, llena de tiendas de diseño, de ropa y de grandes cadenas de gastronomía. Destacan los grandes almacenes Stockmann, parecido a El Corte Inglés nuestro, un edificio de varias plantas con precios escandinavos y personalmente la parte más interesante se encuentra en la planta baja, dónde está la sección gastronómica.
Desde que he dejado mi equipaje en el alojamiento no he parado ni un segundo, así que como estoy en la zona comercial y hay más posibilidades de encontrar restaurantes para comer y estoy que me caigo de hambre (vengo de pasar la noche en el aeropuerto), decido hacer la comida más pronto de lo normal en mi, así que buscando acabo en un restaurante de la cadena Rax Buffet, quizá seducido por su precio de 10,95 € e inigualable en cualquier otro restaurante de todo Helsinki, y lo más importante, es un buffet libre de pasta, ensaladas, pizzas, pollo,... dónde puedes comer todo lo que te apetezca y más!! Ahhh, y la bebida incluida con el refill tantas veces como quieras!!
La operativa es muy sencilla, el local está compartido con el Burguer King, así que solamente debemos bajar las escaleras dónde se encuentra en Rax Buffet, le pagamos el precio a la camarera que muy amablemente nos entrega un plato, los cubiertos y un vaso... y barra libre hasta saciarte!!
No soy muy amante de estos lugares ni cuando viajo ni cuando estoy en casa, pienso que el precio es muy competitivo pero la calidad de la comida es escasa, pero me ha sorprendido gratamente este buffet de Helsinki porque la comida estaba muy buena, sobretodo las alitas de pollo y los cortes de pizza, lo mantienen a una temperatura ideal y cada poco tiempo van reponiendo lo que se va acabando.
En ciudades tan caras como Helsinki es una buena opción, mucho mejor que meterte en una cadena de comida basura y pagar prácticamente lo mismo. Por lo que pude comprobar mientras estaba comiendo, acuden muchos turistas y sobretodo muchos estudiantes de la ciudad. Así que ya sabes, si tienes mucha hambre y no quieres dejarte un presupuesto grande en comer, el Rax Buffet es una buena opción. Os dejo la web del Rax Buffet para que podáis ver cual es el local que os coge más cercano.
Cuando termino de comer dudo en si ir a mi alojamiento que lo tengo al lado a realizar el check in o seguir con mis visitas, así que como me conozco prefiero seguir visitando la ciudad. Esta vez cojo el tranvía por primera vez, ya que mi siguiente destino se encuentra a 3,5 kms. y no me apetece nada pegarme esa pateada recién comido.
- Sibelius Park: Cogiendo el tranvía número 6 y comprando el ticket al conductor (3,20 €) y bajándonos en la parada Töölö, y después de caminar apenas 5 minutos, podemos llegar a este bonito parque dedicado al músico más importante de música clásica de Finlandia, Jean Sibelius.
El parque está diferenciado en dos esculturas, por una parte un busto con la cabeza del músico, y por otra parte un gran monumento construido por más de 600 tubos metálicos. Aunque no es una visita imprescindible y no muchos turistas llegan hasta aquí dada su ubicación bastante lejana del centro de la ciudad, yo no quería perdérmela después de ver espectaculares fotos del lugar a través del blog de Joaquín.
Esta mañana cuando dejé mi equipaje en el alojamiento y Matilda me explicaba como llegar al Sibelius Park, me hizo hincapié y me recomendó que no me perdiera una cafetería que había próxima al parque llamada Cafe Regatta, al momento no le di mucha importancia pero ahora he decidido acercarme después de mi visita al Sibelius Park con tan mala suerte que a estas horas permanece cerrada, así que de camino de nuevo para coger el tranvía no he parado de pensar por qué me sonaba tanto esa cafetería, hasta que finalmente he caido en que es el mismo local que recomendaban mis amigos Isaac y Paula de Chavetas y que tuvieron la suerte de disfrutar en su reciente viaje por la Laponia Finlandesa. De vuelta al tranvía, y como estaba dentro de los 90 minutos desde que compré mi ticket, he vuelto al centro de la ciudad sin volver a tener que pagar por un ticket nuevo.
- Tempeliaukio: Más conocido como la Iglesia de la Roca, es una iglesia luterana excavada dentro de una roca, y dónde dicen que tiene una acústica alucinante. Se encuentra en la calle Lutherinkatu, 3 y su horario de cierre es a las 17:30h, justo en el momento que llegaba yo, así que me ofrecieron pagar el ticket de 3,60 € y visitarla en un momento, o volver al día siguiente. Como no me gustan las visitas express ni pagar por no ver nada, decidí obviar la visita y marcharme sin visitar su interior.
- Three Smiths Statue: De vuelta al centro de la ciudad caminando, y a escasos metros del centro comercial Stockmann y de mi alojamiento, encontramos esta curiosa estatua esculpida por Felix Nylund, dónde representa a tres herreros trabajando en un yunque.
- Suomen Kansallisteatteri: Más conocido como el Teatro Nacional de Finlandia, ubicado justo en un lateral de la Plaza del Ferrocarril, y que justo durante mi visita se encontraba su fachada en un proceso de lavado de cara. Destaca delante del edificio una escultura de Aleksis Kivi, considerado el padre del teatro finlandés.
Son las 18h de la tarde y doy por finalizadas las visitas, así que sin tiempo que perder me dirijo de nuevo a mi alojamiento y realizo el check in, donde aprovecho para descansar un poco y entablar conversación con uno de mis compañeros de habitación, un chino que lleva 6 días en Helsinki y que de ahí no se ha movido en todo ese tiempo.
Un rato después vuelvo a salir a dar una vuelta por la ciudad, vuelvo a la Plaza del Senado para ver la Catedral de Helsinki iluminada y me llevo la decepción que por la noche no la iluminan (almenos el día que fui yo), así que como no tengo ganas de cenar porque hoy he comido mucho en el buffet libre, me paro en el centro comercial Stockmann a dar una vuelta y comprar algo de beber para esta noche y desayunar mañana (5 €) y a las 21h de la noche estoy entrando de nuevo en mi alojamiento, aprovechando para ducharme y relajarme tranquilamente en el salón junto con otros viajeros con la firme convicción de irme pronto a dormir, ya que estoy muy cansado y mañana tengo que volver a madrugar para coger el ferry hacia Tallinn a las 08:30h de la mañana, pero al final me lio hablando con dos chicas españolas que también se alojan aquí y nos acaban dando la 01h de la mañana.
Sin apenas fuerzas para llegar a mi cama, me voy a dormir un rato pensando que en unas 5 horas toca levantarse otra vez.
Su horario es de 09h a 19h y la entrada es gratuita. Se pide discreción a la hora de realizar fotografías y respetar las normas de vestimenta, nada de pantalones cortos ni camisetas de tirantes para los hombres, y las mujeres con pañuelo en la cabeza tapando su pelo.
- Kauppatori: Más conocido como la "Plaza del Mercado" y lugar donde se encuentran los puestos y carpas de comida al aire libre que permanecen abiertos todo el año, algunos tenderetes de artesanía y venta de souvenirs con productos típicos de la zona. Es un buen lugar para hacer un alto en el camino y comer algo, ya que los precios están muy ajustados y podemos probar gastronomía típica del país como la sopa de alce y sobretodo el salmón.
- Puerto de Helsinki: Justo enfrente de la Plaza del Mercado podemos encontrar el Puerto de Helsinki, lugar dónde atracan los cruceros que recorren el Mar Báltico para hacer escala en la ciudad, o lugar desde donde parten los ferries que van y vienen hacia Tallinn (Estonia) o Estocolmo (Suecia).
Hay que tener mucho cuidado porque no todas las compañías parten desde el Puerto de Helsinki, ya que las más importantes parten desde la terminal de cruceros un poco más alejado de la ciudad.
Si tenéis tiempo desde aquí también parten los barcos para visitar la Isla de Suomenlinna, una antigua fortaleza del S. XVIII y a tan sólo 20 minutos de trayecto. Yo no pude hacer esta visita porque no tenía mucho tiempo y en invierno la frecuencia de los barcos no es muy extensa, aparte del frio.
- Havis Amanda: En un extremo de la Esplanade y justo enfrente del Puerto de Helsinki, podemos encontrar esta bonita fuente, que simboliza a una sirena despidiéndose del mar. A partir de aquí da comienzo la Esplanade.
- Esplanade: Es un gran parque arbolado rodeado en cada extremo por lujosas tiendas de diseño, buenos restaurantes y hoteles de categoría. En una de las esquinas se encuentra una de las Oficinas de Turismo de la ciudad, un buen punto de encuentro para hacerse con un plano de la ciudad, resolver todas vuestras dudas gracias al amable personal e incluso comprar algún souvenir.
- Senaatintori: Apenas a dos minutos caminando desde la Esplanade dirección a la Rautatientori, podemos llegar quizás al emblema más turístico de la ciudad, la Plaza del Senado. Esta enorme plaza presidida por una estatua ecuestre del zar Alejandro, es el centro arquitectónico de la ciudad y alberga otros edificios importantes, como el Palacio del Consejo de Estado, la Biblioteca Nacional, la Universidad, y sobretodo la Tuomiokirkko, más conocida como la Catedral de Helsinki, con sus enormes escalinatas y sus cúpulas verdes. Imprescindible su visita al interior, que es gratuita y apreciar su órgano.
- Aleksanterinkatu: Es la calle más comercial de Helsinki, llena de tiendas de diseño, de ropa y de grandes cadenas de gastronomía. Destacan los grandes almacenes Stockmann, parecido a El Corte Inglés nuestro, un edificio de varias plantas con precios escandinavos y personalmente la parte más interesante se encuentra en la planta baja, dónde está la sección gastronómica.
Desde que he dejado mi equipaje en el alojamiento no he parado ni un segundo, así que como estoy en la zona comercial y hay más posibilidades de encontrar restaurantes para comer y estoy que me caigo de hambre (vengo de pasar la noche en el aeropuerto), decido hacer la comida más pronto de lo normal en mi, así que buscando acabo en un restaurante de la cadena Rax Buffet, quizá seducido por su precio de 10,95 € e inigualable en cualquier otro restaurante de todo Helsinki, y lo más importante, es un buffet libre de pasta, ensaladas, pizzas, pollo,... dónde puedes comer todo lo que te apetezca y más!! Ahhh, y la bebida incluida con el refill tantas veces como quieras!!
La operativa es muy sencilla, el local está compartido con el Burguer King, así que solamente debemos bajar las escaleras dónde se encuentra en Rax Buffet, le pagamos el precio a la camarera que muy amablemente nos entrega un plato, los cubiertos y un vaso... y barra libre hasta saciarte!!
No soy muy amante de estos lugares ni cuando viajo ni cuando estoy en casa, pienso que el precio es muy competitivo pero la calidad de la comida es escasa, pero me ha sorprendido gratamente este buffet de Helsinki porque la comida estaba muy buena, sobretodo las alitas de pollo y los cortes de pizza, lo mantienen a una temperatura ideal y cada poco tiempo van reponiendo lo que se va acabando.
En ciudades tan caras como Helsinki es una buena opción, mucho mejor que meterte en una cadena de comida basura y pagar prácticamente lo mismo. Por lo que pude comprobar mientras estaba comiendo, acuden muchos turistas y sobretodo muchos estudiantes de la ciudad. Así que ya sabes, si tienes mucha hambre y no quieres dejarte un presupuesto grande en comer, el Rax Buffet es una buena opción. Os dejo la web del Rax Buffet para que podáis ver cual es el local que os coge más cercano.
Cuando termino de comer dudo en si ir a mi alojamiento que lo tengo al lado a realizar el check in o seguir con mis visitas, así que como me conozco prefiero seguir visitando la ciudad. Esta vez cojo el tranvía por primera vez, ya que mi siguiente destino se encuentra a 3,5 kms. y no me apetece nada pegarme esa pateada recién comido.
- Sibelius Park: Cogiendo el tranvía número 6 y comprando el ticket al conductor (3,20 €) y bajándonos en la parada Töölö, y después de caminar apenas 5 minutos, podemos llegar a este bonito parque dedicado al músico más importante de música clásica de Finlandia, Jean Sibelius.
El parque está diferenciado en dos esculturas, por una parte un busto con la cabeza del músico, y por otra parte un gran monumento construido por más de 600 tubos metálicos. Aunque no es una visita imprescindible y no muchos turistas llegan hasta aquí dada su ubicación bastante lejana del centro de la ciudad, yo no quería perdérmela después de ver espectaculares fotos del lugar a través del blog de Joaquín.
Esta mañana cuando dejé mi equipaje en el alojamiento y Matilda me explicaba como llegar al Sibelius Park, me hizo hincapié y me recomendó que no me perdiera una cafetería que había próxima al parque llamada Cafe Regatta, al momento no le di mucha importancia pero ahora he decidido acercarme después de mi visita al Sibelius Park con tan mala suerte que a estas horas permanece cerrada, así que de camino de nuevo para coger el tranvía no he parado de pensar por qué me sonaba tanto esa cafetería, hasta que finalmente he caido en que es el mismo local que recomendaban mis amigos Isaac y Paula de Chavetas y que tuvieron la suerte de disfrutar en su reciente viaje por la Laponia Finlandesa. De vuelta al tranvía, y como estaba dentro de los 90 minutos desde que compré mi ticket, he vuelto al centro de la ciudad sin volver a tener que pagar por un ticket nuevo.
- Tempeliaukio: Más conocido como la Iglesia de la Roca, es una iglesia luterana excavada dentro de una roca, y dónde dicen que tiene una acústica alucinante. Se encuentra en la calle Lutherinkatu, 3 y su horario de cierre es a las 17:30h, justo en el momento que llegaba yo, así que me ofrecieron pagar el ticket de 3,60 € y visitarla en un momento, o volver al día siguiente. Como no me gustan las visitas express ni pagar por no ver nada, decidí obviar la visita y marcharme sin visitar su interior.
- Three Smiths Statue: De vuelta al centro de la ciudad caminando, y a escasos metros del centro comercial Stockmann y de mi alojamiento, encontramos esta curiosa estatua esculpida por Felix Nylund, dónde representa a tres herreros trabajando en un yunque.
- Suomen Kansallisteatteri: Más conocido como el Teatro Nacional de Finlandia, ubicado justo en un lateral de la Plaza del Ferrocarril, y que justo durante mi visita se encontraba su fachada en un proceso de lavado de cara. Destaca delante del edificio una escultura de Aleksis Kivi, considerado el padre del teatro finlandés.
Son las 18h de la tarde y doy por finalizadas las visitas, así que sin tiempo que perder me dirijo de nuevo a mi alojamiento y realizo el check in, donde aprovecho para descansar un poco y entablar conversación con uno de mis compañeros de habitación, un chino que lleva 6 días en Helsinki y que de ahí no se ha movido en todo ese tiempo.
Un rato después vuelvo a salir a dar una vuelta por la ciudad, vuelvo a la Plaza del Senado para ver la Catedral de Helsinki iluminada y me llevo la decepción que por la noche no la iluminan (almenos el día que fui yo), así que como no tengo ganas de cenar porque hoy he comido mucho en el buffet libre, me paro en el centro comercial Stockmann a dar una vuelta y comprar algo de beber para esta noche y desayunar mañana (5 €) y a las 21h de la noche estoy entrando de nuevo en mi alojamiento, aprovechando para ducharme y relajarme tranquilamente en el salón junto con otros viajeros con la firme convicción de irme pronto a dormir, ya que estoy muy cansado y mañana tengo que volver a madrugar para coger el ferry hacia Tallinn a las 08:30h de la mañana, pero al final me lio hablando con dos chicas españolas que también se alojan aquí y nos acaban dando la 01h de la mañana.
Sin apenas fuerzas para llegar a mi cama, me voy a dormir un rato pensando que en unas 5 horas toca levantarse otra vez.
DÍA 2.- HELSINKI - TALLINN
Hoy toca de nuevo madrugar y a las 06:30h ya estoy desayunando, para poco después abandonar mi alojamiento e ir de camino al tranvía, situado enfrente de la Estación Central y donde apenas solamente debo cruzar la calle. Para llegar a la terminal de ferries de las compañías Eckerö Line o Tallink Silja deberemos dirigirnos a la Terminal Oeste de la ciudad, llamada Länsisatama, que corresponde a la última parada del tranvía número 6T ó 9, que nos dejará enfrente de la terminal. Se recomienda salir con tiempo porque el tranvía va haciendo muchas paradas y hay que estar un mínimo de 30 minutos antes para embarcar, ya que el barco no espera a nadie.
El proceso para embarcar es muy fácil. Deberemos imprimirnos la tarjeta de embarque como si de una aerolínea se tratara, y una vez que abran las puertas se accede al interior del barco sin hacer cola ni pesar equipajes, y cada uno se sienta donde quiera, o se puede permanecer en la terraza (no recomendable para esta época del año por el frio que hace), visitar los diferentes restaurantes o casinos, o como hacia la mayoría de gente, ir al supermercado que es la zona del Dutty Free y consumir como si no hubiera un mañana. Mucha gente, sobretodo los finlandeses, hacen este trayecto en barco y pasan el día en Tallinn y se vuelven a Helsinki en el último barco del día, solamente por aprovechar los precios y comprar alcohol y tabaco, ya que en Finlandia es muy caro.
A mi como me aburre todo esto, estuve sentado en un cómodo sillón reclinable con mesita durante todo el trayecto, mientras veia la sesión de entrenamientos de la Fórmula 1 en una pantalla gigante, y repasaba un poco mi ruta para los próximos días por los Países Bálticos y aprovechando el wifi gratuito.
Y después de una travesía de dos horas y media cruzando el Mar Báltico, a las 11h y puntuales llegamos al Puerto de Tallinn, en Estonia. Durante poco más de una semana recorreré los tres países Bálticos en transporte público, y que iré explicando en sus respectivos posts.
No puedo decir que haya vuelto enamorado o encantado de una ciudad como Helsinki, aunque tampoco me ha disgustado del todo, tengo claro que no haría un viaje para conocerla expresamente pero si os sobra un día en Tallinn o hacéis un viaje por la Laponia, recomiendo hacerle una visita express de máximo un día y sacarle el máximo de provecho a la ciudad.
El proceso para embarcar es muy fácil. Deberemos imprimirnos la tarjeta de embarque como si de una aerolínea se tratara, y una vez que abran las puertas se accede al interior del barco sin hacer cola ni pesar equipajes, y cada uno se sienta donde quiera, o se puede permanecer en la terraza (no recomendable para esta época del año por el frio que hace), visitar los diferentes restaurantes o casinos, o como hacia la mayoría de gente, ir al supermercado que es la zona del Dutty Free y consumir como si no hubiera un mañana. Mucha gente, sobretodo los finlandeses, hacen este trayecto en barco y pasan el día en Tallinn y se vuelven a Helsinki en el último barco del día, solamente por aprovechar los precios y comprar alcohol y tabaco, ya que en Finlandia es muy caro.
A mi como me aburre todo esto, estuve sentado en un cómodo sillón reclinable con mesita durante todo el trayecto, mientras veia la sesión de entrenamientos de la Fórmula 1 en una pantalla gigante, y repasaba un poco mi ruta para los próximos días por los Países Bálticos y aprovechando el wifi gratuito.
Y después de una travesía de dos horas y media cruzando el Mar Báltico, a las 11h y puntuales llegamos al Puerto de Tallinn, en Estonia. Durante poco más de una semana recorreré los tres países Bálticos en transporte público, y que iré explicando en sus respectivos posts.
No puedo decir que haya vuelto enamorado o encantado de una ciudad como Helsinki, aunque tampoco me ha disgustado del todo, tengo claro que no haría un viaje para conocerla expresamente pero si os sobra un día en Tallinn o hacéis un viaje por la Laponia, recomiendo hacerle una visita express de máximo un día y sacarle el máximo de provecho a la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario